El mío es un corazón de dudas, esfuerzos que luchan entre el aquí y el allá. Es el paso desgastante hacia la realización, aliento y sonrisa de los más profundos deseos. Es el grito continuo de mi ser interior. Es "estar aquí" en sustancia pero el "estar allá" siguiéndote a todas partes. Es como una canción sin ritmo definido que se va contigo sin terminar la tonada. Es una obra de teatro delirante que miras por siempre. Es la musa que te deja una parte para una ficción sobre la cual nunca escribirás. Es la historia ya prolongada a través de los años de soledad. Son todas las razones desconocidas esperando juntas para ser descubiertas. Es ser una y otra a la vez. Es ser una queriendo ser la otra y la otra deseando ser la primera. Es saber muy poco acerca de aquellas cosas en las cuales crees. Es saber menos acerca de otras cosas que quieres expresar pero tienes miedo reclamar. Es el estar medio viva y medio muerta simultáneamente. Es un sentimiento estrangulante, una obsesión, la conspiración más intrigante de todos los aires. Es la transpiración de mi olor caribeño encima de la superficie de mi gel norteamericano. Es la actuación suave y silenciosa de un actor en la más oscura de las escenas. Es la partitura completa de la tristeza bordada en una única cadencia de gestos. Es la gloria fantástica de un sueño indeseado de verano. Es la decepción más elevada en una montaña de días agónicos. Es la esencia del silencio en medio de las revelaciones. Es solamente mi corazón que late rápido e incesante como las corrientes constantes del Golfo de México. Es mi corazón dividido secando los finales del tiempo como el agua de esas corrientes sobre el Estrecho de la Florida.
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